La inteligencia artificial (IA) está cambiando muchas profesiones, incluyendo la de los archivistas, pero no necesariamente las está eliminando. En muchos casos, la IA se utiliza para automatizar tareas repetitivas y laboriosas, lo que permite a los profesionales centrarse en aspectos de su trabajo que requieren más habilidades de pensamiento crítico y creatividad.
En el caso de los archivistas, la IA puede ser utilizada para clasificar y organizar documentos, mejorar la búsqueda y el acceso a la información, y ayudar a preservar materiales digitales. Esto puede liberar tiempo para que los archivistas se centren en tareas más complejas, como la interpretación y el análisis de documentos, la creación de exposiciones y programas educativos, y la interacción con los investigadores y el público.
Por otro lado, la IA también puede crear nuevos desafíos y oportunidades para los archivistas. Por ejemplo, puede ser necesario que adquieran nuevas habilidades para trabajar con tecnologías de IA, y pueden desempeñar un papel importante en la enseñanza de la ética y la responsabilidad en el uso de estas tecnologías.
Así que, aunque la IA está cambiando el campo de la archivística, no es probable que «termine» con los archivistas. En cambio, probablemente cambiará el tipo de trabajo que hacen y las habilidades que necesitan para hacerlo.
- Texto generado con ChatGPT-4, con el prompt «¿La inteligencia artificial terminará con los archivistas?